viernes, 29 de octubre de 2010

Imágenes en color a partir de tres fotos en blanco y negro



En esta página de Photojojo podéis ver un experimento aplicable a la fotografía digital para realizar vuestras propias fotografías color a partir de tres imágenes tomadas en blanco y negro utilizando filtros (rojo, verde, azul) durante en momento de la toma. Es bastante útil para comprender los orígenes de la fotografía y la cinematografía en color. En cine Smith, en su kinemakolor, lo aplicó con dos filtros que alternativamente iba colocando frente a cada fotograma en la filmación. Herbert Kalmus, en su sistema technicolor, lo aplicó a tres negativos distintos en blanco y negro (cada uno con un filtro delante) que filmaba simultáneamente.

Es impresionante ver las imágenes de la Rusia de hace cien años tomadas por Sergei Mikhailovich Prokudin-Gorskii. La calidad de color estupenda. ¿No creéis?

En este fotograma de Lo que el viento se llevó, de Victor Fleming (1939), vemos es sistema del technicolor en todo su esplendor.




viernes, 15 de octubre de 2010

La subversión de las imágenes: El surrealismo


Este verano tuve la oportunidad de acercarme a la exposición sobre el surrealismo en la Fundación Maphre, en Madrid. Lamentablemente la exposición ya concluyó, pero queda el estupendo catálogo que la resume. En ella se podían ver fotos, documentos, pero también algunos fragmentos de video con imágenes del circulo surrealista: ahí estaban en movimiento Man Ray con sus amigos y amigas, hasta Picasso en un ambiente festivo y distendido. También se proyectaban cortometrajes: uno especialmente interesante era "Gosth before breakfast" de Hans Richter

Estreno de "Metrópolis" 80 años depués, tal como la concibió Fritz Lang



El 13 de febrero de 2010 se reestrenó en el Festival de Berlín el montaje que Fritz Lang tenía en la cabeza de su "Metrópolis". 80 años después de su estreno alemán, y tras sucesivas mutilaciones por parte de diferentes estudios, hoy podemos ver una versión restaurada con 25 minutos más de metraje, 147 en total. Atrás queda el proyecto de Giorgio Moroder que dirigió una restauración del filme con el material que se conservaba en 1984, apenas ochenta y tantos minutos, utilizando como banda sonora éxitos del pop. Para mí, estas son las dos versiones más intesantes de la película: el experimento de Moroder con imágenes coloreadas, que enfatiza la influencia de esta película en el lenguaje del videoclip, y la fiel versión actual.